Aqui teneis el capitulo 3! Sentimos mucho el retraso pero entre que no hemos estado todas en casa y el problema con el ordenador no se ha podido colgar antes, esperamos que os guste:D
El
viaje ha sido un poco cansado, pero vale la pena hacer todo esto. He
llegado desde Miami para visitar a la persona más buena y simpática que
he conocido jamás. Todo empezó cuando llegue a cuarto de primaria.
Yo
solía ser un chico tímido y solitario así que después de que la
profesora me presentara me senté al fondo de la clase, solo. Unos
minutos más tarde llegó una chica corriendo, pidió disculpas por el
retraso y se sentó a mi lado. Cuando me miró me echó una sonrisa y se
presentó:
- Hola, me llamo Evelin.
- Yo soy Austyn...
- Tranquilo no seas tímido, seremos buenos amigos, lo prometo. - Y otra vez me echó esa sonrisa que curiosamente me alivió.
Desde
que me dijo aquello ella cumplió su promesa y pasaba cada minuto del
día conmigo, incluso los días que yo estaba enfermo venía a verme
después de clase y viceversa.
Cuando
terminamos primaria tuvimos que escoger instituto, y los padres de
Evelin la apuntaron a Aylan College. Por desgracia yo no pude entrar ya
que mi familia no se podía permitir el viaje y nos separamos hasta hoy,
día en el que voy a entrar después de mucho esfuerzo y vamos a poder
cumplir nuestra promesa.
***
Son
las cinco, al fin me he apuntado a natación. Estoy en el pasillo,
dirigiéndome a los vestuarios. Entonces me encuentro con el chico borde
del otro dia. Anda como si nada por el pasillo de la parte femenina del
instituto.
- Los chicos no pueden estar aquí.
-Y quien me lo va a prohibir, ¿tú?
-Eres imbécil. - Cada vez me cae peor.
-Gracias- dice con una sonrisa en la cara.
Lo
miro con mala cara, refunfuño, algo que ni yo entiendo y sigo por mi
camino. Llego a los vestuarios y para mi desgracia veo que Monique está
en el equipo. La entrenadora me da un bañador y un gorro de natación. Me
cambio y salimos a la piscina. Nuestra entrenadora, la señora Anderson,
nos divide en dos equipos, por suerte no me toca con Monique. Es una
carrera de relevos, tenemos que nadar toda la piscina salir y chocar la
mano del siguiente. Me quedo la última de mi equipo, miro al otro
equipo, tendré que nadar contra Monique, que está la última.
Empezamos
empatando pero a medida que pasa la carrera vamos perdiendo velocidad y
acabamos con el contrario delante. Para cuando me chocan la mano,
Monique ya está en el agua. Me tiro y empiezo a nadar lo más rápido que
puedo, a cada brazada siento como el agua me lleva, me impulsa. Escucho a
mis compañeras gritar mi nombre,diciéndome que me dé prisa, pero todo
eso está lejos, muy lejos, ahora solo estamos yo y el agua, nadie más.
Segundos después mi mano choca la pared. Salgo a coger aire y veo como
mi contrincante llega a la pared segundos después de mí. He ganado,
todos gritan mi nombre, me felicitan. Salgo del agua y todas me rodean.
Miro de reojo a Monique que me mira con furia, no le ha gustado que le
ganara. Después de todas la felicitaciones vamos a los vestuarios, nos
duchamos y nos cambiamos. Cuando acabo salgo y me encuentro al director.
-Señor Adams. ¿Sucede algo?
-Señorita
Johnson, la estaba esperando...- Lo miro extrañada y me responde con
una mirada que no acabo de entender- Su compañera, la señorita Lawrence
está en la enfermería, supuse que querría saberlo...
Antes de que terminara la frase ya corría hacia la enfermería.
-¡Bibi!- Grito al entrar.
-¡Shhh!- Me giro y veo a un chico, con el cabello de color miel precioso -No grites, que está dormida.
-¿Quien eres?- Pregunto confundida, ¿Que hace un chico en la enfermería femenina, y con Bibi?
-Voy al club de boxeo con Bibi...
-Bibiana, Bibi es solo para sus amigos.- Le respondo algo brusca.
-De acuerdo... Voy al club con Bibiana. Fui yo quien la trajo.
-¿Que ha pasado?
-Uno del club la ha retado y han luchado, tu amiga ha ganado, pero ha salido mal parada...
-¿Es grave?
-No, tranquila, con un poco de reposo se pondrá bien.
-Gracias, por traerla y... siento haberte hablado así antes...
-No importa.- dice sonriendo.- Soy Andrew, por cierto.
-Noa
-Encantado Noa, voy a tomar un rato el aire.
-Sí, yo me quedo con ella.
Cuando
Andrew sale por la puerta me siento en una silla al lado de Bibi. Me
quedo así un buen rato, esperando a que despierte, pero no lo hace.
Entonces entra Andrew.
-¿Aún sigue igual?- Asiento, un poco somnolienta. Después de piscina estoy muerta, es tarde y no me aguanto en pie.
-Deberías irte a dormir, llevas mucho rato aquí.- me dice él.
-No tranquilo, estoy bien...
-No creo que se despierte, me quedaré yo esta noche.
-¿Si despierta me podrías llamar?
-Si, claro. Dame tu numero y te aviso.- Le doy mi numero de movil, el me da el suyo para que sepa que es él si llama.
-Gracias, buenas noches.
-Buenas noches.
Echo
un último vistazo a Bib, que sigue dormida y me voy. Llego a mi
habitación a rastras, me cambio como puedo, me meto en la cama y a los
segundos me quedo dormida.
***
Tres
meses, una semana y cuatro días. El tiempo aquí pasa igual de lento que
siempre. No se que hacer en todo el día, me peino, doy vueltas,
pienso... bueno, las voces piensan por mí. Todo el rato dicen lo mismo,
mi nombre, mi dirección... supongo que es para no olvidar. Hoy me han
dicho algo distinto, un nombre de un chico pero la verdad no lo
recuerdo. Luego han venido algunas imágenes suyas, castaño con ojos
azules. Solo recuerdo eso.
Aparte
de lo de las voces me ha parecido que han traído a otra chica, ya que
he escuchado su voz chillando. De repente se ha callado, le habrán
administrado algo para calmarse como me hicieron a mí.
***
No
paro de escuchar gente que me llama, pero yo no veo a nadie. Siento
como me mueven, noto un pinchazo y me despierto. A mi izquierda la
doctora me mira fijamente.
- ¿Qué pasa? - Aún estoy confundida.
- ¿No recuerdas nada? - A mi derecha un chico me empieza hablar, su cara me suena de algo.
- No... ¿Quién eres?
- Señorita Lawrence no se incorpore tanto, aún está muy reciente y no queremos que se vuelva a desmayar.
- ¿Pero qué ha pasado? - No entiendo nada de nada.
-
Tuviste una pelea con un chico en el club de boxeo, ¿recuerdas? De
repente empezaste a toser sangre y te desmayaste, llevas desde ayer por
la tarde dormida. - Recuerdo algo.. ¡Sí! Como olvidarlo... - ¿Cómo te
encuentras?
- Bien... Confusa, pero bien... Por cierto, ¿quién eres tú?
-
Señorita este chico la trajo desde el gimnasio masculino hasta aquí en
brazos y se ha quedado toda la noche sentado en esta silla para ver si
despertaba.
- ¿En serio? Vaya muchas gracias... esto... ¿tu nombre? - No puedo creer que un chico haya hecho esto por mí.
- Andrew Black.
- Muchas gracias, de verdad, soy... - Antes de terminar la frase el responde.
- Bibiana Lawrence, lo escuché en clase de boxeo.
-
Sí... - Esto es increíble, un chico guapo ha estado toda la noche a mi
lado y se ha fijado en mi nombre. Al fin y al cabo esto de que me
desmayara tiene su lado positivo.
- ¡Ah! Se me olvidaba, tengo que avisar a tu amiga.
- ¿Noa?
- Sí, vino por la noche pero estaba muy cansada y le dije que se fuera a dormir.
- Oye... ¿Podría pedirte un favor? ¿Podrías ir a buscarla? Siento molestarte tanto, si dices que no lo entenderé.
- No, tranquila, la avisaré, no te preocupes que no es ninguna molestia. Ahora vuelvo, tu descansa.
Esto
tiene que ser un sueño... Pero no quiero despertar. En estos momentos
no se porque pero soy muy feliz de que alguien se haya preocupado por
mi.
***
Ya han pasado tres días desde lo de Bibi, por fin estamos en fin de semana.
Mi
segunda clase de natación fue igual o mejor que la primera, volví a
ganar. En cambio Bib no ha podido ir a boxeo ya que la doctora Robins le
ha dicho que repose hasta la semana que viene. Debo admitir que desde
que salió de la enfermería ha estado muy rara, como ausente, pero muy
feliz y me alegro por ella. Supongo que eso de que Andrew la llevara a
la enfermería le hizo pensar que es un buen chico.
Hablando
de chicos, me he encontrado un par de veces más con aquel maleducado
sobre el que caí hace tiempo. Cada vez que nos miramos es como si nos
fulmináramos con un rayo y no termino de entender porqué, ya que solo
fue un pequeño golpe. Es como si me odiara, pero no entiendo por qué, ni
siquiera nos conocemos.
Como
es Sábado y no hay nada que hacer, porque casi nadie se queda los fines
de semana en el instituto, Bibi y yo hemos decidido ayudar en todo lo
que se refiere a jardinería y ahora mismo nos dirigimos a pedirle la
llave del sótano a director para coger las cosas.
***
Llevo
unos cuatro o cinco días en esta ciudad y la verdad no han sido muy
agradables. Primero porque el apartamento que he alquilado huele fatal y
los vecinos son muy escandalosos. Segundo, porque no me dejan ingresar
en Aylan College hasta que no haga toda la transferencia. Aunque lo peor
de todo no ha sido eso...
Era
jueves y hacía mucha calor. No tenía nada que hacer así que decidí
visitar mi próximo colegio y de paso a mi mejor amiga. Cuando llegué me
quedé sin palabras, aquel instituto era enorme y las instalaciones
increíbles. Lo único que no me gustó fue que los chicos y las chicas
estaban separados y de esa manera yo no podría encontrarla de ninguna
manera... Pero mis esperanzas aumentaron cuando la vi en el jardín, ¡no
me lo podía creer! Sin dudarlo un segundo me acerque a ella para darle
una sorpresa.
- ¡Evelin! ¡Evelin!- había una verja entre nosotros. - ¡Evelin estoy aquí!
- … - Se quedó sin contestar, ni siquiera se acercó a mirarme.
- ¿Te acuerdas de mi? - No entendía nada.
- ¿Quién eres? - No me lo creía, de verdad no se acordaba.
- Soy yo, Austyn.
- No conozco a ningún Austyn, te habrás confundido.
Su fría mirada se clavó en la mía, se giró y se fue como si nada. Noté como el corazón se me partía en pedazos.
Ahora estoy sentado intentando averiguar porqué la chica en que más he confiado no se acuerda de mi y es muy doloroso...
***
Noa y yo acabamos de llegar a la sala del director.
- Buenos días señoritas, ¿qué hacen ustedes por aquí?
- Director Adams, ¿nos podría prestar la llave del sótano?
- ¿Cómo? ¿La llave del sótano? ¿Para qué la quieren ustedes? - Parece un poco extrañado.
-
Pues verá... - Noa es muy cortada para hablar así que decido explicarlo
yo. - Como no tenemos nada que hacer hemos decidido ayudar a arreglar
los jardines y necesitamos el material del sótano.
- Bien, si es por eso ahora mismo le digo a alguien que les traiga todo.
- No se preocupe, podemos ir nosotras.
- Tranquilas, no es molestia, pero si hace falta iré yo personalmente ya que es mi faena como director.
-
Pero señor Adams, de verdad que no nos molesta ir... - Noa parece
bastante desconfiada y preocupada, se siente insegura al hablar.
-
Señorita Johnson no insista más, iré yo al sótano. - No entiendo porqué
el director insiste tanto en no dejarnos ir al sótano, es como si allí
hubiera algo que no quiere que nadie vea...
-
Oiga señor director, bajaremos nosotras ya que es nuestro deber como
alumnas y es un trabajo voluntario. Además usted tiene que quedarse aquí
por si surge algún problema en el colegio.
- Si insisten tanto les daré la llave, pero solo cogan lo necesário y cierren rápido por favor.
- ¡Entendido! - Respondemos a la vez.
En cuanto cogemos la llave vamos hacia el sótano. Por el camino nos encontramos a Andrew. Al verlo me da mucha alegría.
- ¡Bibiana! - Dice él con una gran sonrisa en la cara.
- ¡Andrew! - Respondo con un poco de vergüenza.
- Hola Black. - Noa y Andrew siempre se llaman por el apellido, como muestra de amistat supongo
- Hola Johnson. ¿Qué hacéis por aquí chicas?
- Vamos hacia el sótano para coger las herramientas de jardinería, ¿y tu?
- Estaba buscando al director, me han dicho que estaba en esta parte del instituto. A propósito, ¿cómo te encuentras?
-
Bien, gracias por preguntar. La semana que viene ya volveré al club, no
os librareis de mi tan facilmente. - Cuando digo eso me empiezo a reír y
él se contagia.
- Bueno chicas me tengo que ir, tener cuidado. Te veo en boxeo Bibiana. - Inesperadamente me guiña el ojo.
- ¡Claro! ¡Adiós Andrew!
- Hasta pronto Black.
En
cuanto lo pierdo de vista Noa me da un codazo. Al principio no entiendo
porqué pero cuando me sonríe las piezas empiezan a encajar.
- “Te veo en boxeo Bibiana”. - Dice en plan burla.
- Oye que solo ha intentado ser simpático.
- Claro, eso es lo que tu crees. Le gustas.
- ¿Qué? Estas loca... - Me sonrojo.
- Vamos hasta tu lo crees.
- No... ¿Por qué iba a gustarle yo?
- Eres guapa, lista y fuerte. Se pasó una noche entera a tu lado hasta que te recuperaste, ¿qué más pruebas quieres?
- Eso no tiene nada que ver... - Sí,sí que tiene que ver.- Además, ¡casi no nos conocemos!
- Todo el mundo con solo mirarte sabe que eres buena persona, y no solo eso, él también te gusta, ¿a qué sí?
- Mira, ya hemos llegado. - Por suerte para mi hemos llegado al sótano antes de contestar.
Abro
la puerta. Entramos y empezamos a coger lo necesario, tal como dijo el
director. De repente Noa se tropieza y cae encima de una sábana que a la
vez cae y deja una puerta a la vista.
- ¿Estas bien?
- Si... Un poco dolorida.
- Tu como siempre tan torpe. - Nos empezamos a reír.
- Bibi, ¿qué es esa puerta?
- No lo se... nunca la había visto. Oye... ¿La abrimos? Tenemos llaves.
- Pero el director dijo...
- Ya lo sé, pero no tiene porqué enterarse.
- De acuerdo... Pero si pasa algo...
- Tranquila, diré que la culpa es mía.
- Está bien...
- Allá vamos.
Uyuyuy!! Fijo que en esa sala hay alguien! Vamos, esta cantado!! Jaja me encanta, es una historia chulisima! Habrá lío entre Bibi y Black? Y entre Noa y el chico ese borde? Siguiente ya! Besos:)
ResponderEliminarjajaja exactamente no abrá alguien, mas bien algoxd pero ya lo veraas en el proximo capitulo! Nos alegra que te guste:) La historia entre las dos parejas ya se veraa aunqeu puede que cueste que llegue sobretodo entre Noa y el chico borde, que de momento no se llevan muy bien pero tenemos sus historias planeadas y la verdad es que promete!:)
EliminarEl siguiente lo colgaremos mañana, qe ya esta todo listo solo falta el repaso
Besos:)
Vais a conseguir que haya un enamoramiento masivo hacia chicos bordes! Jaja, yo empezare en nada:) besos:))
Eliminarjajaja es que los bordes tienen su puntoo jajaj espero el proximo tuyo prontooo besooos:)
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